Dos palabras que describen las competencias de una persona- ¡conocimiento y habilidad!. A primera vista, ambas parecen ser sinónimos pero si lo pensamos un poco comprendemos que ambos son conceptos muy diferentes.
Conocimiento se refiere a el aprendizaje de una persona de conceptos, principios e información respecto a un tema (o temas) en particular a través de libros, medios de comunicación, enciclopedias, instituciones académicas y otras fuentes. Habilidad se refiere a la aptitud para utilizar tal información y aplicarla en un contexto. En otras palabras, el conocimiento hace referencia a teoría y habilidad hace referencia a la aplicación exitosa de esa teoría en la práctica y la obtención de los resultados esperados. Por ejemplo, un vendedor con una Maestría en Administración de Empresas quizás haya aprendido todos los principios del marketing y las ventas en la escuela de negocios. En su trabajo conocería más acerca de su compañía, de la linea de productos, el mercado objetivo, competidores, etc. Todo lo anteriormente mencionado es conocimiento. La transferencia de ese conocimiento para crear una estrategia de venta exitosa y el poder alcanzar esos objetivos en ventas es la habilidad de la persona.
Los métodos de prueba y error son una manera grandiosa para aumentar tus habilidades. A veces, ciertas habilidades son inherentes a una persona. Por ejemplo, algunas personas nacen siendo carpinteros. Pero las aptitudes solo pueden llevar a una persona hasta un cierto nivel. Para avanzar, es necesario que la persona además adquiera conocimiento. Por ejemplo, mientras que una persona puede ser buena en la carpintería, la adquisición de una licenciatura en ingeniería podría hacer maravillas con las habilidades de esa persona. De la misma manera, algunas personas pueden tener conocimiento teórico pero pueden no ser capaces de utilizarlo para realizar una tarea.
Desde una perspectiva filosófica, el conocimiento es intangible pero las habilidades pueden hacerse tangibles al aplicar esas aptitudes a un contexto y obtener el resultado deseado.
Además, el conocimiento teórico puede ser compartido con otras personas. Algunas habilidades nunca pueden ser transferidas a otras personas. Por ejemplo, un buen mecánico de autos puede saber inmediatamente el problema que tiene un auto por la intuición que el o ella ha construido por años al reparar diferentes autos. El mismo mecánico de autos puede no ser capaz de transmitir esa intuición a un aprendiz.
Resumen:
1. El conocimiento hace referencia a información teórica adquirida sobre un tema, mientras que la habilidad se refiere a la aplicación práctica del conocimiento.
2. El conocimiento puede ser aprendido, mientras que la habilidad requiere de exposición práctica y además puede ser innata.
3. Por último, tanto el conocimiento como la habilidad son necesarios para dominar un campo de estudio.