Mientras no todo el mundo se considera “goloso”, hay algunas personas que renunciarían alegremente al azúcar de sus dietas por completo. El azúcar puede tomar muchas formas como sacarosa, glucosa y fructosa. Si buscamos el común denominador más bajo, entonces tendríamos simplemente glucosa y fructosa porque estos dos monosacáridos son los elementos básicos para crear la sacarosa.
Hay muchas similitudes entre glucosa y fructosa. Ambas son azúcares simples, y son monosacáridos. Los azúcares simples contienen solamente un tipo de carbohidrato en lugar de dos como la sacarosa disacárido. La fórmula química de la glucosa y la fructosa es la misma también: C6(H2O)6. Una vez que entran al cuerpo, ambos azúcares eventualmente se dirigen al hígado para metabolizarse. La mayoría de los alimentos procesados y naturales contienen una combinación de fructosa y glucosa. Inclusive los alimentos que esperarías que fueran casi todo fructosa como el jarabe de maíz de alto contenido de fructosa, en realidad tiene una composición de 55%-45% total de fructosa.
Sin embargo, hay unas pocas maneras claves en que estos dos azúcares difieren.
Composición molecular
Mientras que su fórmula química es la misma, las moléculas de la glucosa y de la fructosa están establecidas en formaciones diferentes. Ambas comienzan al formar hexágonos con sus seis átomos de carbono. Cada carbono está unido a una molécula de agua.
- La glucosa- Es una aldohexosa. Su carbono está unido a un átomo de hidrógeno por un solo enlace y a un átomo de oxígeno por un enlace doble.
- La fructosa-Es una cetohexosa. Su carbono está unido solamente a un átomo de hidrógeno por un solo enlace.
Metabolismo
Como se mencionó anteriormente, ambos azúcares van a parar al hígado. Sin embargo,
- La glucosa- se come, es absorbida en el torrente sanguíneo, se dirige al hígado donde es descompuesta para suministrar energía al cuerpo entero. El proceso de descomposición requiere de la insulina.
- La fructosa-se come y es absorbida pero libera su energía más lentamente que la glucosa. No necesita de la insulina para ser metabolizada y por lo tanto es ligeramente una mejor opción para los diabéticos.
Sabor
La fructosa es muchas veces más dulce que la glucosa. Mucha gente cree que la fructosa sin cocer puede ser realmente insoportable. Especialmente cuando las frutas, que es en donde más fructosa se encuentra, se pasan de maduración. Una vez que la fructosa se cocina pierde mucho de su dulzura. Es por eso que para hornear se recomienda usar sacarosa, o azúcar granulada en lugar de fructosa cristalizada.
Resumen
- La fructosa y la glucosa son monosacáridos con la misma composición química pero con diferente estructura molecular.
- Estos dos azúcares se encuentran en alguna combinación en casi todos los alimentos azucarados disponibles.
- La glucosa necesita insulina para una metabolización apropiada mientras que la fructosa no necesita insulina para ser procesada.
- La fructosa cruda es muchas veces más dulce que la glucosa.